La compresión en las prendas deportivas, aunque ya lleva varios años, sigue siendo una tecnología novedosa que evoluciona año con año. Nacieron como prendas médicas que se utilizaban para pacientes que se encontraban por largos periodos de tiempo en cama o para aquellos que tenían problemas de circulación.
Al ver los beneficios que éstos pacientes tenían, esa tecnología comenzó a migrar hacia el mercado deportivo, ya que la mejora en la circulación sanguínea representaba una mejora en el rendimiento al tener una mejor oxigenación muscular durante la actividad y a su vez una recuperación mas rápida después de la actividad física.
El crecimiento de la demanda de este tipo de prendas originó un nivel de competencia y el surgimiento de marcas que hoy te dejan en duda cuáles realmente tienen una base médica y científica y cuáles otras simplemente son prendas “apretadas”, lo cuál es una diferencia sustancial
Una prenda con tecnología tiene una compresión gradual que te asegura que la sangre siempre va a tener un retorno mas acelerado hacia el corazón, lo cual realmente te dará el beneficio, mientras que una prenda que simplemente “aprieta” puede ser contraproducente e incluso dañina, ya que el grado de compresión de la misma podría ser inverso y en lugar de favorecer el retorno sanguíneo podría estar obstaculizando la circulación.
Si quieres utilizar una prenda de este tipo, te sugerimos que te cerciores que haya una marca con un laboratorio que respalde su correcto funcionamiento para que realmente sientas el beneficio, y si de paso tiene diseños y telas super pro como las de Compressport, mejor aún.
Mike
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